viernes, 27 de marzo de 2009

Les contamos la historia se Chechu

Chechu era una perrita que ingresó al refugio con parálisis en sus patas traseras lo que la obligaba a arrastrarse la mayor parte del día (tenía su carrito pero no lo podía usar por muchas horas) y compartía su vida con el famoso Tommy que también tenía el mismo problema con las patas traseras. Tommy fue adoptado y se fue a vivir a Villa Gesell pero todos nos preguntábamos que iba a pasar con la Chechu ya que por su condición era difícil encontrarle un adoptante más allá de la tristeza que ella sentía por la partida de su "amigo del alma", entonces fue justamente al sábado siguiente que una de las voluntarias llamada Laura nos avisó que la quería adoptar y se la llevó a su casa y hacia una nueva vida que comparte con otro perrito. Ahh... eso sí Chechu va todos los sábados a tomar su café con medialunas a un barcito en Almagro, gracias Laura a vos y a tu familia por haberle dado la oportunidad de ser feliz a nuestra querida Chechu.

lunes, 16 de marzo de 2009

No pudimos cumplir con Goliat

El martes de la semana pasada Goliat se convirtió en una estrellita que nos alumbra a todos los que lo conocimos, su avanzada edad complicó su salud y a pesar del trabajo de un grupo de voluntarios que día a día no bajó los brazos para atenderlo, limpiarlo y cuidarlo Goliat dijo basta a su vida. Y lamentablemente no pudimos cumplir con Goliat en encontrarle una familia que lo amara y lo cuidara en el último tramo de su vida, eso nos duele a todos mucho y nos queda el nudo en la garganta porque a pesar de nuestros esfuerzos no pudimos darle el final feliz a su historia, querido Goliat nunca te olvidaremos y siempre vas a estar en nuestra memoria y en nuestros corazones.

lunes, 9 de marzo de 2009

La carta que la mamá de Juliana nos mandó por mail...

A todos:

El día 13 de Febrero, buscando a la perra de mi mejor amiga encontré el aviso de Julianita.

Luego de mirar varias mascotas encontradas, en un costadito, formando parte de un anuncio de “no abandones mascotas ancianas” aparecía, Jualiana, Chuli para mí.

Enseguida mandé mail y enseguida me respondieron, que Juliana era una perrita vieja, de unos 10 años, que había aparecido hacia más de un año en la protectora, atropellada, que la habían operado todo lo que pudieron, que también la habían castrado, ya que no estaba castrada cuando llegó y que era una viejita cascarrabias.

Así y todo, me dije y les dije que la quería llevar a mi casa, que yo tenía otras mascotas, a lo que la protectora me informó que se llevaba bien con otros canes, más que no sabián con felinos. Bueno, igual insistí y quedé que al finde siguiente pasaría por la protectora a buscarla.

Algunas “condiciones climaticas adversas” y demás yerbas, hicieron que mi encuentro con Juliana se postergara casi una semana más, hasta el 5 de Marzo.

Mientras, la gente de la protectora, las voluntarias, insistieron en que
Juliana era cascarrabias, que mordía y demás…. y OJO, no de malas ni obvio, porque no quisieran que adoptara a Juliana, sino por la simple razón que todos nosotros pensamos en la situación ideal de adopción, donde en can o el felino idilicamente corren a nuestros amorosos brazos, para ser rescatados de su soledad humana, donde el adoptado es bello, simpático, juguetón, cariñoso, tranquilo, sanito, estético, etc….. Bueno, este NO era el caso de Juliana, mas bien todo lo contrario….

Juliana, al haber sido atropellada y operada es una perrita poco agraciada, que tiene la mitad de su cara, como en su juventud, parecida a un Spitz (el tambien llamado Pomeraña) y la otra mitad “diferente”…. tiene demodexia, creemos que causada por stress, por lo que su pelo dista mucho de ser tupido y dócil…. y una patita rectificada con el pie quebrado y sin sensibilidad, por lo que camina raro… además por su edad y lo que fuere que haya sido de su vida antes de entrar a la protectora, al momento de encontrarme con Juliana, ella casi no se movía, mordía, mostraba los dientes y gruñia (salvo que uno tuviera comida en la mano…)

Bueno, as
í y todo y contra todo pronostico dije que quería a Juliana en mi casa….

De ahí en mas el l
ío fue como sacar a Juliana de la protectora, ya que NO se deja poner la correa, camina con dificultad, no se deja alzar, ni abrazar…bueno, Pachi, con quien contacte en primera instancia por la adopción de Juliana y con quien quede ese día para encontrarme en la protectora, me facilitó una canasta y luego de “cazarla” literalmente con una manta, la metimos en la canasta, y emprendimos el viaje a casa (de Barracas a Villa Devoto en taxi) entre gruñidos, tarascones y quejas de parte de Juliana…… si alguien vió las fotos verán que Yo básicamente adopté una canasta plástica, muy linda por cierto, pero sólo tenía la esperanza, la mía y de todas las/los proteccionistas de tener un nuevo “hijo” en casa….(aclaro, que yo en casa tengo un perro, pequeño, pero perro al fin y trece gatos…..todos ellos, así como los 4 gatos que se me murieron, la perra que falleció y los otros 8 perros que por su tamaño, DEBÍ dar en adopción, todo, todos, vinieron de la calle…..)

Bueno, la cosa es que finalmente,
Juliana se calmó en el taxi, y llegamos a casa….

Le presté la segunda habitación de casa, que yo llamo escritorio o estudio, dado que no sabía como se llevaria con gatos tenía que dejarla encerrada en algún lado por un tiempito; tampoco sabía que tiempito…el máximo era hasta el día de hoy, día en que con las proteccionistas que estaban el jueves en SPAS, que si
Juliana no se adaptaba, Yo me comprometia a devolverla…

Bueno gente, sin extenderme mucho, les cuento que el jueves
Juliana comió, no se dejaba tocar, pero en cuanto vió su canasta nueva, se apoderó de ella y descansó…. el viernes a la mañana la dejé en “su habitación” tomando sol y me vine a trabajar, al volver me calzé una manopla para sacar asaderas del horno (todo para cuidar mi deditos, dado que Juliana tiene pocos dientes, pero los usa muy bien.. jijijiji) y comencé a acariciarla con la manopla…

Obvio, los primeros 3 minutos se resistió, mas luego inclinaba la cabeza, para que mi mano(pla) cambiara el lugar de los mimos.... el día sábado, ya sin manopla, sólo con mi mano, me arriesgué a acariciarla y no se resistió, le abrí la puerta de su habitación, para que viera a mis otros hijos y los vió, los olió, le gustó ver a mi perro, los gatos no la jodieron ni preocuparon y al toque se puso a correr por el comedor, jugando con mi perro…..

Para resumir… Chuli ex
Juliana, al día de hoy lunes, sólo 5 días después de haber sido adoptada, hace pancita, responde a Chuli, mueve la cola, me viene a recibir a la puerta, pide mimos y “rascadita” y si bien no se deja poner la correa, ni cortar del todo las “rastas” de pelo, es una perrita totalmente diferente de la que adopte el jueves pasado….. basta decir que la piel con demodexia, ya no es rosa caliente, sino color piel…

A que voy con todo esto? Bueno, sólo quería recordar que a veces lo que creemos un animal desahusiado, no es tal, que a veces un animal “agresivo” solo es un animal aterrorizado por el hombre, que ha sido traicionado mil veces, maltratado otras mil…

Desde ya quiero agradecer primero a los dueños originales de
Juliana, que o bien la perdieron y no la buscaron, o bien la abandonaron… segundo a aquellos que la atropellaron y abandonaron, que posibilitaron que Juliana terminara en el refugio, a la gente que hizo la página web de la protectora, que puso a Juliana como ejemplo de animal viejo sin “esperanzas” y por sobre todo a Juliana misma que me permitió mostrarle que si bien, evidentemente, se había topado con mucha gente mala en su vida, también habíamos de los buenos….

(gracias Estefanía
de parte de todos nosotros y sobre todo de Juliana por adoptarla)

martes, 3 de marzo de 2009

La historia de Trucho (ahora se llama León)

León ahora es feliz y lo adoptaron a pesar de sus 10 años, a veces dudamos en adoptar cuando nos ofrecen un perro de edad avanzada, pero sea cachorro o adulto cada animal nos va a brindar distintas y hermosas vivencias, lo que no va a variar es el amor incondicional y el eterno agradecimiento por haberlos elegidos desde el corazón.
La adopción de animales con edad avanzada es muy importante porque podemos brindarle cuidados y cariño en los últimos tramos de su vida.